jueves, 29 de noviembre de 2012



Es un milagro el nacimiento de una nueva vida,
por la fe de las mujeres al rostro del destino,
y un pretexto para alcanzar eternidades.
Embajadores potenciales de ellos mismos,
abiertos a todos y con todos.
Corazones enormes
que se aferran a la permanencia y al amor.
La llama de la fortuna se refleja en los semblantes.
Es el anhelo de la estética, las imágenes, la medida,
los amantes, los placeres, los éxtasis, los vientos.
Es un refugio de la melancolía,
es una amistad que sonríe.
Las raices de lo amado yacían en los jardines,
en la fiebre de los enamorados.
El canto noctuno al regreso de la aurora y las imágenes.
Las mujeres nacieron libres,
vencieron la muerte,
vencieron a los asesinos de corazón frío.
Sobrevivir,
nadie lo sabe,
solo los amantes.
Los héroes,
dioses seductores,
a los jóvenes que querían acariciar la muerte.
Algunos murieron,
se encontraron con una jornada maldita,
súbitamente parados, en la seducción de la envoltura dorada,
victima de unas canciones, emularon los acordes.


                         VUELA AL CIELO DESNUDA.


Vuela al cielo desnuda, al horizonte,
vive el inmenso mar a la deriva,
envuelve el alma pequeña eternamente,
refúgiate en el olvido.

Recobra el movimiento del presente,
las noches puras de vaivenes,
la sencillez de la luna,
el cerco de la memoria,
los garabatos de los sueños,
las flores de los balcones.

Y déjate llevar por multitud de canciones.
Encuentra amores perdidos.
Húndete inexorablemente en el abismo de los sueños,
que no atiende a súplicas ni a ruegos.
Y tendrás infinidad de tonos y colores,
de poesías incompletas,
quizás sin palabras,
o de alegrías que cantan.

Degusta el aguacero de las rosas,
las canciones de las calles,
el ingenio, las obras perfectas, el arte,
y como el Ave Fénix,
renace de las cenizas.                    








Flor de cerezo.

 
Delicada belleza de las nubes sueltas,
sujetas por miles de mariposas con las alas abiertas.